Ariel Díaz, Scientific Atlantology International Society (SAIS)
Pruebas científicas varias y dataciones por carbono-14 (14C) confirman hipótesis de un atlantólogo hispano cubano sobre el gran tsunami que destruiría la capital de la Atlántida y que desencadenaría el final de la civilización que se había desarrollado en una isla ubicada entre Iberia, Marruecos, Canarias y Madeira.
Hace casi veinte años que el hispanocubano Georgeos Díaz-Montexano, atlantólogo historiador y escritor, viene defendiendo que el final de la Atlántida podría haber sucedido en algún momento entre el 2500 y el 1500 A.C., y que tal catastrófico final se habría desencadenado por uno o varios eventos sísmico-tsunámicos que acontecerían en esas mismas fechas en una zona del Atlántico inmediata a las costas de Iberia, Marruecos, Canarias y Madeira. “Platón describe la historia de la evolución de Atlantis, desde sus orígenes hacia el final del Paleolítico Superior y principio del Mesolítico, y después va ampliando la descripción durante las siguientes edades hasta que el hombre alcanza el nivel de la Edad del Bronce, situando el final del imperio cuando gobernaban los reyes-héroes Kekrops, Erechtheos y Erychthonios, y antes de Theseos, lo que enmarca el final de Atlantis, o sea, el momento en el que ocurre la catástrofe sísmico-tsunámica que sumerge a la ciudad principal de Atlantis, entre el 1.600 y el 1.300 a. C.”.1 Cuando Díaz-Montexano exponía estas ideas, entonces no existía ningún estudio de atlantología histórico-científica que hubiera podido determinar con precisión y pruebas científicas (dataciones de estratos mediante 14C de corales, conchas, madera, etc.) la existencia y fechas de tales posibles paleotsunamis…